Conoces la anécdota, pero no al autor II

 "¡A la mierda!"

Nada nuevo bajo el sol, pero hay expresiones que adquieren un nuevo sentido cuando salen de boca de los grandes. Y es que nadie ha mandado a otra persona a la mierda de la misma manera después de que Fernando Fernán Gómez lo hiciera con un admirador (exadmirador desde ese momento). Ahora lo hacemos intentando emular una voz profunda y cavernosa, parte ineludible del legado de este actor, escritor y director de cine.

El enfado y el exabrupto están ahí, pero no podemos permitir que la memoria colectiva de Fernando Fernán Gómez se reduzca a eso. No nos puede hacer olvidar sus interpretaciones ni su importante labor como director de un cine español de gran calidad que mucha gente no sabe que existe.

Además, Fernán Gómez fue académico de la lengua y es autor de novelas como El viaje a ninguna parte, que también llevaría al cine, y de obras de teatro como Las bicicletas son para el verano. La primera es un retrato cruel y melancólico de la vida de una compañía de teatro ambulante a finales de los años 50. La segunda nos presenta la vida de una familia de clase media a la que la guerra civil coge por sorpresa y que tendrá que asumir a la fuerza la nueva realidad que se impone en España.

Hablar más de ellas es absurdo. Ven a la biblioteca a leerlas.